José Císcar, vicepresidente del Consell, ha contestado esta tarde al Comité de Empresa sobre la propuesta de viabilidad que éste le presentó y su respuesta ha sido que no es viable y que por tanto RTVV se cerrará. Desoye así no sólo a los trabajadores de RTVV sino también a la sociedad valenciana a la que priva de unos medios públicos llevados a la ruina por la mala gestión de su partido.
Condena también a la sociedad valenciana a pagar por el cierre mucho más de lo que costaría mantener RTVV durante dos años, según el plan presentado por el Comité. Ahora tendrá que dar explicaciones sobre cual es el motivo real del cierre, ya que ha quedado demostrado que no es económico. Somos muchos los que pensamos que detrás de este cierre está la intención de darle unos medios públicos a una empresa privada, probablemente de algunos amigos.
Es por ésto que desde CGT exigimos la dimisión de José Císcar y del presidente no electo Alberto Fabra, por trasladar el pago de su mala gestión a todos los valencianos además de por sus continuas mentiras y manipulaciones.
A los trabajadores queremos decirles que no todo está perdido, que vamos a seguir luchando en todos los terrenos para que el cierre finalmente no se produzca y para que los auténticos culpables del despilfarro paguen por sus culpas.
Seguiremos luchando por una televisión pública, en valenciano y de calidad y por nuestros puestos de trabajo. Mucho ánimo a todos y recordad que "la única lucha que se pierde es la que se abandona".
La lucha continúa.
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