Poco a poco van trascendiendo datos de la reunión del Consejo de Administración de ayer. Según publica EL PAÍS, parece que Rosa Vidal no tiene intención de pagar los documentales de Trinquela, aquella basura ultra vendida a precio de oro y luego intentada maquillar con oscuros chanchullos de compra-venta a televisiones amigas.
EL PAÍS. 25-5-05-13 Sólo se emitió el documental dedicado al juez Baltasar Garzón que no fue, precisamente, un paradigma de objetividad. Los otros dos, uno sobre el GAL y otro sobre Alfredo Pérez Rubalcaba se quedaron en la nevera de Canal 9. Y, a juzgar por la respuesta que dio ayer la directora general de RTVV, Rosa Vidal, en el consejo de administración, no se emitirán jamás por falta de actualidad y calidad, y tampoco se pagarán como estaba previsto.
Los documentales fueron adquiridos en 2011 a la productora Triskel, vinculada al que fue director de antena de la cadena autonómica y, anteriormente, director de organización de Intereconomía, Fernando Lázaro Quintela. Se contrataron por 532.500 euros, más el IVA. Desatada la polémica por la denuncia de sobrecoste y “saqueo” del diputado socialista Josep Moreno, el Consell y RTVV aseguraron que el coste real fue inferior a 276.00 euros por una serie de recompras (de la propia Triskel) y de ventas de los derechos, en una operación puesta en evidencia por el propio informe de la Sindicatura de Comptes de 2011. Diversos profesionales del sector afirmaron que el precio pagado era, en cualquier caso, muy superior al del mercado.
La directora general de RTVV, Rosa Vidal, respondió al consejero Rafael Xambó que ha sacado a Triskel de los proveedores de Canal 9 que deben cobrar sus deudas a través del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), dotado por el Estado. Además, Vidal ha pedido a sus técnicos una nueva valoración del precio de los documentales, según explicó el consejero de Compromís, que destacó el cumplimiento de la directora a la hora de responder y entregar documentación requerida.
Ajena al mundo de la televisión pública y procedente del despacho de Broseta, Vidal no se ha salido en sus primeros pasos como directora de una senda legalista que llama la atención después de tantos años de escándalos en el seno de Canal 9.
En cualquier caso, Vidal destacó otros asuntos del largo consejo de administración de ayer. Incidió en la reducción de 89 a 50 el número de puestos directivos e intermedios, lo que supondrá un ahorro anual de más de 1,5 millones de euros, y en que la oposición no había votado en contra del nuevo organigrama. También se nombró al nuevo subdirector de programas, cargo que ocupará el exresponsable de Informativos de fin de semana Luis Miguel del Baño. El periodista Chente Oliver fue destituido de la subdirección de Ràdio 9.
El consejo aplazó al 3 de junio el punto más esperado del orden del día, el contrato programa de RTVV para los próximos tres años y que ha de suscribir con la Generalitat. El borrador abunda en la idea de sostenibilidad económica de contenidos y servicios. La única área en que se especifica claramente que será de producción propia será la de informativos, que incluye deportes. También en este caso, hay una referencia explícita a que deberá ser en valenciano. En el resto de programación, no hay ninguna alusión a la producción propia. Se dice que se fomentará preferencialmente el valenciano, aunque sólo se concreta en la programación infantil que, será fundamentalmente en la lengua autóctona y en inglés.
El borrador, elaborado con el asesoramiento del despacho de Garrigues, plantea también la fusión de la segunda cadena Punt Dos y Nou 24, creando un canal dedicado a información, cultura y deportes que fomente la cultura y la lengua valencianas. El documento contempla la conversión en una redacción única de Informativos y Deportes, entre Ràdio Nou y Televisió Valenciana.
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